Todo sería tan fácil si existiesen frases para terminar una relación que alejaran a las personas que despreciamos después de usarlas sexual, económica y socialmente sin hacer que quedemos como unas desgraciadas indeseables para otros hombres… pero… ¡esas frases existen!
Tal vez sean frases de rompimiento de cajón, lugares comunes, insultos a la inteligencia, muestras de una evidente falta de imaginación, pero siempre están ahí, a punto de salir de nuestros labios en situaciones de presión. Bajo las circunstancias, usualmente son preferibles a una verdad que mande a tu pareja a lanzarse de un puente o a ti a una unidad de emergencias en el hospital más cercano. Es que las personas se toman las cosas a un modo demasiado personal…
¿Cuando entenderán que “necesitamos un tiempo” es un eufemismo?
Después de decir eso, esperas que la víctima entienda y se vaya. No que se quede a pedirte explicaciones y te pregunte si estás bien. Pero la gente es demasiado simple algunas veces, así que para facilitar los procesos de rompimiento (y el entendimiento de dichas fórmulas de cortesía hipócrita) les dejo algunas frases con las aclaraciones que necesitan:
Podemos seguir siendo amigos… pero quiero tener algo en caso que todo lo demás falle.
Ya lo superé… pero sigo esperando a que me conteste el teléfono.
Es sólo una amigo/a… pero le tengo ganas.
Me he dado cuenta que no me quieres… vamos a ver como te convenzo de esto.
Necesitamos ver a otras personas… y la que voy a ver este sábado no quiero verla contigo.
Soy incapaz de mentir… pero es que soy mitómana.
Yo te quiero pero no de ese modo… los regalos costosos que me diste no te los pienso devolver de todos modos.
Es lo mejor para ambos… yo soy feliz y tú tienes una historia triste para tu próxima conquista.
Soy un espíritu libre… prefiero que me llamen zorra a que sigan pensando que soy tu novia.
El sexo no es lo mas importante… pero ni siquiera para eso me sirves.
Mi vida ya es demasiado complicada… esto de tener más de una pareja al mismo tiempo me está enloqueciendo.
Tú necesitas a alguien que te quiera de verdad… o al menos que no le moleste esforzarse en pretenderlo.
No te preocupes, nos seguiremos viendo… pero sólo si me es imposible evadirlo.
Se acabó el amor… ve y consigue un producto similar de la competencia.
Quiero algo más serio… pero no tienes dinero ni trabajo.
Te quiero como a un hermano… por eso no pienso llamarte ni en navidad.
Ya no es lo mismo… pero hay que ver como me aburres.
Vamos a terminar mal… hazme caso, no quieres saber a lo que estoy dispuesta con tal de acabar con esto.
Tú nunca tomas las iniciativa… y esto de ser una abusadora me hace sentir culpable.
Nos estamos haciendo daño… lo cual me molesta porque no soy yo la que más hiere.
No estoy listo/a para una relación… no estoy TAN desesperado/a aún para conformarme contigo.
Eres demasiado bueno para mí… y no quiero decirte cuantas veces te he sido infiel.
Tenemos que hablar… pero me conformo con dejarte un SMS para mandarte a la ******.
Lo nuestro no funciona… y yo prefiero comprar cosas nuevas antes que mandar las viejas a reparar.
Tengo la sensación de que nos estamos alejando… pero tú insistes en acercarte.
Estamos yendo muy rápido… y no me agrada el sitio al que quieres llevarme.
No eres tú, soy yo... y alguien más.
Ahora que has sido debidamente instruida en el arte de las frases de rompimiento, no olvides que al usarlas debes guardar la compostura y alejarte rápidamente de tu pareja despreciada. No te quedes ahí para que te implore, suplique y se queje, ya que una vez sucede eso, no puedes volver a romper usando tu frase memorizada. Ni siquiera la verdad puede salvarte a esas alturas.
En esos casos, es mejor decir que tienes una venérea.
